Enclavado en un recinto de San Ángel, el restaurante Magda cumple su primer año, destacándose por su sinceridad culinaria
La zona de San Ángel en Ciudad de México es reconocida por su arte, cultura, casonas impresionantes, y por supuesto, el Exconvento del Carmen. Justamente ahí, cerca de este último espacio, podemos encontrar el restaurante Magda, el tercer concepto del chef Mario Espinosa, que se caracteriza por su sinceridad culinaria.
Magda debe su nombre al río Magdalena, que hace varios años nutría de agua al convento de San Ángel. Esta historia, y lo que sucede alrededor de un río, inspiró al chef Espinosa para su propuesta culinaria y a Ricardo Casas, diseñador industrial a cargo del proyecto.
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Los espacios de Magda
Techos altos, paredes antiguas de piedra, distintas tonalidades de azul que rememoran al río, lámparas espectaculares, dos salones privados y una terraza alta es como nos recibe Magda, en donde la armonía de cada textura, color y decoración se combina con la amabilidad de su personal.
Por supuesto, elegir en dónde sentarte para disfrutar la experiencia es complejo por la belleza de cada espacio, sin embargo, si te gusta estar el aire libre, el jardín es para ti, allí, te estarás sentando en un lugar que encierra alrededor de 400 años de historia, pues era parte del huerto del Exconvento del Carmen.
Sinceridad culinaria
Una vez que tu aliento regresó después de apreciar lo majestuoso del restaurante, es momento de ir a los platillos. Como te decía, el menú está inspirado en aquel río que dejaba ver su cause por San Ángel, en los animales que podrían haber llegado a él y las actividades que podemos llevar a cabo.
Es así como el menú de Magda nos lleva por veredas que van desde ceviches hasta chamorros, pasando por productos marinos, frutas y verduras llenas de frescura. De esta forma, el chef Mario no solo consiente a la comunidad de San Ángel sino a todos los que quieran adentrarse a esta cocina natural.
Los platillos
Entre los platos imperdibles está el ceviche de chicharrón regio, inspirado en los tiempos en el que el chef Espinosa vivió en Mérida y conoció la chicharra con castacán, un plato que forma parte de las botanas de las cantinas y que esta vez fungió como musa para crear el ceviche.
Por otro lado, las tortitas de papa al sartén con chile morita, así como la tostada de salmón, son dos platos que denotan el cuidado del ingrediente y de las técnicas, pues poseen esa sencillez y naturalidad que destacables.
Seguimos con el chamorro estofado con jugo de cochinita pibil y el asado de picaña con vegetales demuestran la maestría del chef. Para acompañar cada plato, está su coctelería, la cual tiene la esencia de Magda pero con un twist de autor que pude llegar a sorprender.
Al final, un mil hojas con frutas frescas no puede faltar, y aunque ya no tuve estómago para seguir comiendo, definitivamente Magda es uno de los restaurantes que tiene que estar en tu lista y no solo para comer o cenar, también para desayunar un pan de yema con miel yucateca o molletes con chicharrón prensado.
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Celebramos gustosos el primer aniversario del restaurante Magda, el esfuerzo del chef por crear un concepto al que, en sus propias palabras: “me adapté al lugar”, y esperamos ansiosos los platillos especiales que mes con mes complementarán la carta. ¡Enhorabuena!
📍Del Carmen 4, San Ángel, CDMX.
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