Más que Ribera del Duero, Castilla y León es la zona del norte de España que ofrece un sinnúmero de experiencias vínicas disponibles en México
Días soleados, noches frías, clima cálido y seco en verano, y variedades como la Albillo y Prieto Picudo son algunas de las características de una zona española rica en vinos: Castilla y León.
Estas condiciones climáticas, junto con la diversidad de suelos (cantos rodados, arenas y arcillas) y altitudes que varían entre 450 y 1,000 metros, crean un entorno ideal para el cultivo de muchas uvas, donde reside la emblemática Tempranillo con diferentes nombres y variaciones en cada región
“Son 15 zonas de vinos, en mayoría denominaciones de origen y en todo el territorio Vino de la Tierra de Castilla y León, que en todos los casos garantiza una elaboración a detalle”, describe Iván Galván, sommelier a cargo de la cata de Castilla y León, presentada en el Hotel Camino Real.
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Durante la cata de diferentes ejemplos de vinos aparecieron etiquetas poco habituales y que sugieren alternativas más allá de los vinos clásicos de la región.
En la denominación de origen Toro existe un blanco elaborado con Albillo y Malvasía, con seis meses de barrica y de una viña planta en 1920. Llamado Algoritmo y de Bodegas Bigardo refleja que aquí también hay opciones a tintos.
Oro de Castilla Finca Los Hornos proviene de Rueda, de una finca antes dedicada al cereal y que ahora cultiva la Verdejo que para este producto se cría 9 meses en fudres.
Los rosados también hacen presencia como el Splendore de Bodegas Casajús, en Ribera del Duero, que en realidad es un clarete (rosado intenso) que evoca la frescura que puede dar esta región de tintos.
Los esfuerzos biodinámicos, basados en movimientos de astros y de la luna especialmente, también tienen cabida como en el 1618 Razón Áurea, de Bodega Negón, en Ribera del Duero.
Clásicos como Yllera Vendimia Seleccionada, de Yllera Bodegas y Viñedos, muestran que la calidad no necesariamente proviene de una denominación de origen, como en este caso que es un Vino de la Tierra de Castilla y León.
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Finalmente, una de las uvas poco conocidas de la zona es la Prieto Picudo que muestra su expresión en un vino de Zamora de nombre Otero Reserva, de Pago Valleoscuro. Bodega centenaria que ha aprovechado la cepa autóctona.
Regiones poco conocidas
Algunas de las zonas vinícolas poco conocidas de Castilla y León.
Bierzo: se caracteriza por sus tintos frescos y afrutados, con la uva Mencía. Clima con influencias atlánticas, permite producir vinos más ligeros y elegantes
Cigales: reconocida por rosados y claretes con Tempranillo principalmente. Clima continental y suelos de cantos rodados.
Arribes: Sus uvas son Juan García y Bruñal para tintos y Malvasía para blancos. Clima de suaves influencias mediterráneas con gran potencial aromático.
Arlanza: Descripción: aquí domina la Tempranillo y la altitud de sus viñedos, entre 700 y mil metros ayuda a su frescura.
Valles de Benavente: Es una IGP (Indicación Geográfica Protegida) con uvas como la Prieto Picudo para tintos y rosados, y Verdejo para blancos.
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