Tablas Taller Agrícola, un proyecto de valores

La inmensidad del campo y el clima perfecto de Valle de Guadalupe, es el hogar de tablas taller agrícola, un proyecto que irradia sinceridad y congruencia con sus valores.

Lorena Tirzo

Con una gran vista a las parcelas y el aroma de la fermentación en los tanques, Tablas se muestra tal como es: una idea orgullosamente mexicana con un equipo apasionado por la agricultura y con un profundo respeto por sus elementos.

Consolidada en 2017, la vinícola ha dejado que su producto hable por ella, la tecnología en la que se apoya está pensada para conservar la nobleza de las uvas sin interferir en su desarrollo.

Dividido en nueve tablas o secciones numeradas, cada una con una varietal diferente, el terreno se trabaja con constancia y se aprovechan las bondades del viñedo para que los resultados sean perfectos. Su extensión de 83.5 hectáreas, cubiertas de vides y olivos, está enfocada en perfeccionar sus frutos y aprender de ellos, para ir armando de poco en poco su propia identidad.

Inspirados por la naturaleza 

La atención al entorno se refleja en su vino, el cual es cuidado con esmero desde la selección de las vides que mejor se desenvuelven en esta región, en el que después de estudiar con detenimiento el territorio y la adaptación de las plantas, se ha experimentado hasta encontrar lo que realmente funciona para la bodega.

Llenos de orgullo, han buscado ir a la vanguardia con procedimientos y técnicas responsables con el impacto negativo ambiental, custodiando las condiciones racionales para el medio durante el trabajo. Siguiendo sus ideales sustentables, la construcción vinícola está diseñada en dos niveles para aprovechar la gravedad en el proceso de producción, por lo que el fruto cae directo a los tanques de fermentación después del despalillado.

En un esfuerzo por realizar prácticas ejemplares, también se utiliza el agua proveniente de pozos naturales para el riego, se recicla toda la basura generada, así como se reutilizan recursos y materiales para el trabajo cotidiano. Así, el uso de paneles solares para cubrir todo el consumo de energía y la reutilización de elementos, ayuda a preservar el lugar que ocupan y a regresarle al planeta un poco de lo mucho que nos ofrece.

Arte entre vides 

Junto a los cultivos se encuentran cuatro esculturas imponentes, creadas por el artista Jorge Yaspik y que destacan con originalidad el lugar, equilibrando el paisaje entre lo orgánico y lo moderno, conceptos que se aprecian en la marca. Las piezas de más de 30 toneladas de peso, están colocadas estratégicamente en los surcos y resaltan el valor del diseño de este preciado líquido mexicano, honrando la tierra del Valle de Guadalupe.

El arte no es lo único que reside aquí, la comunidad, integrada por trabajadores originarios de diferentes partes del país, de la que 50 % son mujeres habilidosas, vive en los alrededores o en las barracas dentro de la zona y es un valioso pilar con el que existe un compromiso. Cuidar de las manos que atienden el taller con beneficios y servicios, es parte fundamental de la misión y, como resultado del esfuerzo colectivo, el elixir que se arma allí está rodeado de cariño.

Sin pretensiones, el vino es la muestra de lo que se trabaja, engloba el esmero en la cosecha a la vid y el detalle puesto en la elaboración. Transmite con honestidad el suelo del que proviene de manera amable en el paladar, sin complejidad innecesaria o intensidad que distraiga, volviéndose un medio que le permite a las varietales comportarse naturalmente.

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Tablas tiene en mente crear vinos Premium con gran énfasis en la materia prima que se emplea, trasmitiendo la naturalidad agrícola. El emblema de la casa es ideal para sumergirse en este universo, y toma su nombre de los números de las tablas de sus varietales, siendo la tabla número 1 Tempranillo, la 4 Grenache y la 5 Petit Syrah. El vino 145 tiene una crianza de 12 meses en barrica francesa, sin embargo, los taninos están pulidos para brindar una sensación suave y equilibrada en boca, con un toque de acidez, por ello es el acompañamiento ideal para barbacoa, lasaña o tacos árabes que guardan cierto grado de grasas. La contribución de un equipo especialista enológico, ha permitido que se perfeccione cada añada de este blend, manteniendo la pureza de las cosechas y adicionando contribuciones destacables en la construcción de la bebida.

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Hoy, se fabrican cerca de 25 mil cajas de botellas de alta calidad en la bodega, que buscan brindar toda una experiencia placentera al ser degustadas por los conocedores y wine lovers.

Su crecimiento exponencial tomó por sorpresa a los productores, quienes se preparan para expandir la vinícola y su techo para poder seguir el paso comercial que va con gran impulso. La fidelidad a las cualidades esenciales de la marca, ha hecho que tenga como prioridad el crecimiento del área, con la intención de darle el trato adecuado a las uvas y sacar lo mejor de ellas.

El panorama pinta prometedor, así que con futuros planes en mente, Tablas está listo para crecer y convertirse en una insignia del Valle de Guadalupe.