Una edición más de la Paneada del Siglo por Santa Clara se llevó a cabo en el Parque Aztlán, donde se seleccionaron los mejores panes de muerto de la temporada
¿Quién no disfruta del pan de muerto, su esponjosa masa perfumada y la capacidad de chopearse en un chocolate caliente? Santa Clara sabe que es una preparación de temporada con muchos adeptos, por lo que un año más ha realizado en el Parque Urbano Aztlán la Paneada del Siglo, un evento que reunió a 21 panaderías de la Ciudad de México.
Te podría interesar: Los 5 mejores panes de muerto en CDMX
La jornada, repleta de sabores, colores y tradiciones, no solo rindió tributo a la cultura mexicana, sino que también premió a los panes de muerto que lograron destacarse por su sabor y originalidad.
Durante el evento, las panaderías participantes presentaron sus mejores versiones del emblemático pan de muerto, con recetas tradicionales que evocan la nostalgia de las abuelas y creaciones más arriesgadas.
Te podría interesar: 3 cocteles para el Día de Muertos
El concurso se dividió en distintas categorías que reflejan la diversidad de esta receta, y los ganadores fueron seleccionados por el público.
- Pan de Muerto Tradicional: La panadería Elizondo se llevó el primer lugar con su masa tipo brioche de miga suave y corteza dorada. Pastelería Mallorca y Palacio de Hierro completaron el podio con sus recetas de sabores clásicos y notas cítricas.
- Pan de Muerto Relleno: El primer puesto fue para Maison Kayser, que destacó con un relleno de nata francesa y un toque de naranja. Garabatos y Sofitel empataron en el segundo lugar con sus versiones de crema de la casa y una mezcla de flor de azahar y naranja, respectivamente, mientras que Amado cerró la categoría con su relleno de guayaba.
- Pan de Muerto Más Original: La Pastelería Alcazar sobresalió por su propuesta de pan relleno de mazapán casero, un homenaje a los sabores de la infancia. Amado y Tere Cazola también fueron reconocidos por sus creativas versiones de pan con relleno de guayaba y queso bola, respectivamente.
Además, hubo un concurso de disfraces de catrinas que desbordó creatividad, y un espectáculo de drones que iluminó el cielo con figuras de catrinas y panes de muerto. Los esfuerzos de Santa Clara nos recuerdan la importancia de celebrar nuestras tradiciones culinarias, y nos muestran que, ya sea con un toque de nata francesa o con una masa rústica, el pan de muerto sigue siendo un lazo que une generaciones.
No Comment! Be the first one.