Celebramos con Bodegas Cetto su vendimia 96 en la Fiesta de Colores
Si hay una familia que ha contribuido a la industria del vino en México, es la familia Cetto. La historia de Bodegas Cetto comenzó en 1924, cuando Angelo Cetto llegó a México desde Italia para fundar la vinícola, en 1928.
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Hoy, siete generaciones después, la dirección de la marca está a cargo de Luis Alberto Cetto, mientras que su hijo, Luis Angelo Cetto, ya se está preparando para el momento en que le toque tomar las riendas.
Este año, Bodegas Cetto celebró su vendimia número 96, y lo hicieron con su ya tradicional Fiesta de Colores, que no solo festeja la llegada de la nueva cosecha, sino que también pone en valor el trabajo en el viñedo y en la bodega. En este año, el evento inició con la bendición de las primeras uvas, y después continuó con una degustación de las más de 50 etiquetas de la bodega, antes de llevar a cabo el concurso de pisado de uvas, uno de los momentos más divertidos para muchos de los asistentes. Luego, llegó el momento de la comida de cuatro tiempos a cargo del chef David Salgado, para cerrar la noche con un concierto del dúo Sentidos Opuestos.
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Bodegas Cetto ha sabido mantenerse a la vanguardia, adaptándose a las necesidades del consumidor y estando al frente de ellas. Y en este momento, no se quedan atrás, pues ya obtuvieron la certificación orgánica de Viña Alegre, un viñedo de 75 hectáreas. De esta manera no solo se mantendrán a la cabeza de las tendencias del mercado, sino que también responden a una necesidad urgente del Valle de Guadalupe y de todas las regiones vinícolas del mundo: la de la responsabilidad medioambiental.
Cercanos a su primer siglo de historia, Bodegas Cetto ha demostrado ser referente en la industria del vino en México, y seguramente seguirá siéndolo. Por lo pronto, nos quedaremos pendientes de todas las novedades de la vinícola, y entusiasmados por probar su primera añada de vinos hechos en viñedos orgánicos.
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