Frente al encantador parque Emilio, en pleno epicentro de Polanquito, se encuentra el restaurante que lleva el mismo nombre y que, tras una renovación ha quedado más lindo que nunca.
Si bien, este sitio ya era bastante conocido por sus espectaculares arroces, en esta nueva etapa el recién llegado a México chef Nicolás Román ha propuesto enaltecer los clásico españoles que arrancan suspiros.
Desde un pantomate en perfecto equilibro sobre una hogaza recién horneada y coronada con jamón ibérico de bellota, pasando por los boquerones en su punto y los clásicos huevos rotos, hasta terminar con un plato perfecto de torrijas, todo, de inicio a fin es una gozada.
Pero Nicolás también ha puesto sobre la mesa una serie de platos que rescatan las técnicas e ingredientes mejor valorados de otras latitudes y presenta, por ejemplo, un espectacular falso risotto con queso manchego y trufa, y unos tacos de pato con salsa de tamarindo que, si fuera bien visto, nos habríamos chupado los dedos al comerlos.
El lugar es cómodo, acogedor y con un impecable servicio que, sin ser invasivo, se antepone a tus deseos. La carta de coctelería acompaña con un aire muy fresco, y la selección de los vinos, en la que por supuesto destacan grandes clásicos españoles, resulta muy buena compañía para el menú de alimentos.
Sin lugar a dudas, Emilio nos ha sorprendido de nuevo y estamos ansiosos por volverlo a visitar. ¡Qué rico!
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Emilio Castelar 107, Col Polanco. CDMX
@emiliorestaurante | 55.5280.5877
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